Algo Anda Bien

 

El pasado domingo 12 de octubre, un programa periodístico de investigación se difundió un video en el cual quedó registrada la conversación desarrollada entre un alumno de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Asunción y un docente de la misma Institución.-

 

El material evidenciaba el modo en que el Docente concedía “mejoras de calificación” o “notas”, mediante el cobro de sumas de dinero, por la provisión de “materiales didácticos” de su supuesta autoría, que finalmente resulto tratarse de meras copias de contenidos publicados en la página Web Wikipedia, que se autodefine como “…la enciclopedia de contenido libre que todos pueden editar…”. En otros términos, se trata de un sitio virtual cuyo contenido es el fruto y resultado de los “aportes” de sus propios usuarios y visitantes, lo que significa que nadie se hace responsable de la calidad, exactitud y validez de la información publicada, y menos aún, que tales materiales hayan sido sometidos a algún tipo de control de calidad.-

 

Páginas como ésta abundan en internet, entre las que se incluyen “monografias.com”, “rincondelvago.com”, “buenastareas.com”, entre muchas otras, sin contar o detenernos en los miles de Blogs que ofrecen información no certificada.-

 

Lo usual es que algunos estudiantes recurran a estas “fuentes de información” para la preparación de Trabajos Prácticos o Trabajos de Investigación que se imponen como requisito para cumplir con el proceso educativo.-

 

Esta circunstancia obliga al Docente a desarrollar una labor verificación previa de fuentes, para su posterior corrección y calificación, de tales pretendidos trabajos.-

 

En algunos casos, se ha podido detectar, que el alumno se ha limitado a elaborar una carátula y un índice, y con ello han pretendido acceder a buenas calificaciones.-

 

Debemos ser claros, también hay casos en los que las “fuentes” utilizadas para el efecto son libros de texto, de indudable calidad académica y científica, pero los trabajos no son el resultado de una investigación, sino de una mera transcripción, sin siquiera citar fuentes.-

 

Estas prácticas extendidas en el ámbito universitario pueden resultar explicables cuando son seguidas por los alumnos, pues quedará en manos del Docente, someter dichos trabajos a un examen riguroso, e imponer las sanciones académicas que corresponden.-

 

Pero, resulta inexplicable, que desde la Cátedra, desde la Docencia, se desarrolle este tipo de prácticas, y sobre todo, que su resultado sea “vendido” a los alumnos como material didáctico de enseñanza, mediante paga que garantice una “mejora” en la calificación, facilitando la promoción académica a cursos o grados superiores.-

 

Este tipo de conductas, que podrían – inclusive – calificarse dentro del tipo penal de Cohecho Pasivo Agravado (Art. 301 del Código Penal: “…1º El funcionario que solicitara, se dejara prometer o aceptara un beneficio a cambio de un acto de servicio ya realizado o que realizará en el futuro, y que lesione sus deberes, será castigado con pena privativa de libertad de hasta cinco años; … 3º En estos casos, será castigada también la tentativa…”) cuando su autor es Docente de la Universidad Nacional de Asunción, en su condición de Funcionario Público, de conformidad a su definición establecida por el Art. 14, inc. 14, del mismo cuerpo legal citado.-

 

El profesor denunciado en el programa televisivo, ha presentado su renuncia al cargo, y el Consejo Directivo de la Facultad se la ha aceptado, pero con ello el caso no queda concluido.-

 

Falta aún que algún Fiscal se ponga a la altura de las necesidades e inicie una investigación destinada a aclarar definitivamente lo ocurrido y procure las sanciones que la ley contempla, en caso de que corresponda.-

 

Falta aún que las distintas casas de estudios universitarios adopten las medidas necesarias para que hechos como estos no se repitan o – quizás – se sigan reproduciendo.-

 

Del mismo modo, falta también que reconozcamos el valor moral y ético de los alumnos que arriesgando – inclusive – su futuro académico, exponiéndose a represalias, y hasta a la crítica de aquellos que consideran que con su procedimiento ha contribuido a desprestigiar a la Institución.-

 

Llámese como se llame, De Beitía, Gonzalez, Benitez o Perez, el alumno que denunció o denuncie (en el futuro) hechos de esta naturaleza o cualquier otro tipo de irregularidad, ha hecho lo correcto y merece ser imitado. Su conducta, por el contrario a lo que algunos afirman, representa la necesidad de recuperar prestigio cuyo daño es solo atribuible a aquellos Docentes que desde la Cátedra incurren en irregularidades.-

 

Muchas cosas andan mal. Ellas deben ser denunciadas para permitir las correcciones necesarias que garanticen a la sociedad la excelencia académica de los egresados, pero el joven protagonista de esta denuncia, nos devuelve la convicción de que en la Facultad de Derecho de la UNA, definitivamente, Algo Anda Bien.-

 

Jorge Rubén Vasconsellos