¿Quién no le gana un juicio al Estado Paraguayo?

 

Hace menos que un mes atrás, el Presidente Cartes, declaraba ante la prensa que el Estado Paraguayo adeuda “…a los mismos paraguayos…”, casi dos mil millones de dólares como resultado de demandas judiciales promovidas en su contra, en medio de las críticas que formulaba contra “el sector privado”.-

 

La crónica periodística señalaba que el Jefe de Estado “… hizo especial énfasis en que el Poder Judicial no colabora a evitar más deudas al país, ya que es la instancia donde se da la mayoría de los fallos en contra del Estado…”.-

 

Aunque el Presidente no ensayó un diagnóstico y se limitó a presentar lo que – evidentemente – considera un problema, atribuyó el hecho a la “falta de colaboración” del Poder Judicial.-

 

Sería importante que nos dijera el titular del Ejecutivo cual es la colaboración que espera. Pero, si considera que los Jueces deben rechazar todas las demandas promovidas por particulares para “colaborar” con el Estado estará equivocado.-

 

Los Jueces son – o, por lo menos debieran ser – terceros independientes e imparciales (Art. 16 de la Const. Nac.), no son colaboradores del Estado, del Poder Ejecutivo, ni del Presupuesto General de Gastos de la Nación. Su función es aplicar la ley, allí donde se la ha violado, sin importar si el responsable es un particular o el Estado.-

 

Aunque la realidad sea otra, y el mensaje del Presidente de la República haga mella en nuestro sistema judicial débil, sumiso y corrupto, el Ejecutivo debe abordar el tema con rigor y seriedad, pues, la gran cantidad de demandas promovidas contra los órganos del Estado se origina en la ineptitud, inexperiencia o venalidad sus funcionarios.-

 

Son ellos quienes violan las leyes. Son ellos quienes incumplen contratos. Son ellos quienes – en ejercicio de sus funciones – provocan daño a los particulares.-

 

Debe – también – examinar con seriedad la labor de los Abogados que representan los intereses del Estado en los conflictos judiciales, porque, en muchos casos, éste pierde los juicios por la ineptitud, negligencia o connivencia de aquellos.-

 

El problema es más complejo que el presentado por el Presidente de la República y no se soluciona con la “colaboración del Poder Judicial”, se soluciona obligando a sus subalternos a hacer bien las funciones para las que han sido designados.-

 

De lo contrario, es lógico que se sigan promoviendo demandas contra el Estado y éste siga perdiéndolas, abultándose aún más el monto de las deudas respaldadas por sentencias judiciales. Es lógico y razonable que cualquiera le gane juicios al Estado, lo ilógico sería que nada más que algún reducido de privilegiados tenga la posibilidad de hacer responsable al Estado por las inconductas de sus funcionarios.-

 

Es preferible un Estado endeudado, antes que un Estado irresponsable.-

 

jorge ruben vasconsellos